Joan Ribó ha recordado que la ciudad es solidaria y no quiere más muertos en el Mediterráneo
«València está dispuesta para acoger las 629 personas desamparadas a bordo del barco Aquarius, que se encuentra en el Mediterráneo a la espera de instrucciones para atracar en un puerto» tal como ha anunciado hoy el alcalde Joan Ribó, al recordar que València es una ciudad refugio, una ciudad solidaria «que no quiere que haya otra tragedia en el Mediterráneo». El alcalde ha sido tajante: “no queremos otro Aylán”, en referencia al niño refugiado aparecido muerto hace unos meses en las playas de Turquía.