Las nuevas tendencias suelen venir de más allá del Atlántico, y cuando llegan se instalan y arraigan profundamente porque somos una tierra ávida de aprender.

Y así ha sucedido con las fake news políticas, pero nosotros le añadimos nuestra salsa particular y no es otra que el adoctrinamiento callejero.

Los españoles en general vivimos menos ‘atados’ a las tecnologías y es ese el motivo que cualquier acción cibernética tenga que complementarse con la humana para que tenga una gran efectividad. Y de este modo como sí de diseminar folletos de una nueva doctrina se tratara, sufrimos a los acólitos políticos esparciendo fake news ,sobre sus contrarios, con el método boca oído para de este modo llegar a los que no se nutren a través de los wasaps envenenados.

Las personas indefensas ante esta gran embestida, que durará al menos hasta las próximas elecciones, está barajando varias opciones para reducir los riesgos de empacho político, pero hay que reconocer que está resultando muy difícil porque las tertulias televisivas y radiofónicas no hacen más que echar fuego a estos ardores de los partidos políticos. Y es que estamos en un momento que cualquiera de nosotros o tenemos o somos los temidos cuñaos que se relacionan con estas gangs del voto y la urna.

Por este motivo no es de extrañar que la gente abrumada de tanto abigarrado proselitismo ha optado por neutralizarlo a base del himno Vete de #LosAmaya:

"¡Vete! no quiero verte. ¡Vete! con tus mentiras ¡Vete! lejos de aquí... "

pues eso, que estoy en ello aprendiéndome la letra y ensayando el estribillo………(¿yo a Eurovisión?)